“Saber no es suficiente, debemos aplicar. Desear no es suficiente, debemos hacer”.
(Johann Wolfgang von Goethe)
El cuerpo físico sufre las consecuencias de nuestro ritmo de vida, alejado de la naturaleza y en constante estado de sedentarismo y estrés.
El movimiento entonces debe ser creado. Elegido y aplicado.
Como no se da de manera natural, debemos programarlo.
Todos los estados físicos pueden ser mejorados.
El movimiento proporciona reactivación a los sistemas dormidos.
Empuja al corazón a bombear más sangre y así hacerla llegar a lugares donde antes no fluía.
Con la sangre vienen los nutrientes y el oxígeno, que hace que todo se renueve. Y que los desechos puedan ser sacados del cuerpo.
Al realizar movimientos permitimos a nuestras articulaciones lubricarse y a nuestros huesosfortalecerse. Desaparece el dolor y el sentido de rígidez.
acción y reposo
Descanso
La relajación es un estado mental, no físico.
No existe un cuerpo relajado con una mente agitada.
En nuestro pensamiento es donde comienza todo.
Luego pasará al cuerpo físico.
Nuestro cerebro vibra. La manera en que vibra es medida en ciclos por segundo.
Asi:
→ en estado de vigilia tenemos entre 14 y 30 ciclos por segundo (Beta)
→ en estados de relajación de 8 a 14 ciclos por seg.(Alfa)
→ en estado de meditación de 4 a 8 ciclos x seg.(Theta)
→ durante el sueño de 2 a 4 ciclos x seg.
Lo que ocurre cuando bajamos la frecuencia cerebral es que nuestros pensamientos cambian.
Y también cambia la química que se genera, nuestra drogas endógenas.
Estas son algunas de las HERRAMIENTAS con las que podemos trabajar juntos.
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